Alejandro Simonoff es coordinador del Centro de Reflexión de Política Internacional del Instituto de Relaciones Internacionales de la UNLP e investigador del Instituto de Investigaciones de Humanidades y Ciencias Sociales (UNLP-CONICET).Miembro de la Red Argentino Brasileña de Estudios de Política Externa, de Defensa y Seguridad Internacional, conformada por la Universidade Federal de Rio Grande do Sul, Universidade Estadual Paulista, Universidade do Estado de Rio de Janeiro, Universidad Nacional de La Plata, Universidad Nacional de Rosario, Universidad Nacional de Quilmes. (Mais info)
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¿Cuáles son los principales cambios en la política exterior argentina en este nuevo contexto? ¿Cuáles son sus prioridades y como se queda el relacionamiento con Brasil y el Mercosur?
En la política de la nueva administración se habla de un giro de 180 grados con respecto a la gestión anterior, sobre todo en la relaciones con las potencias tradicionales (Estados Unidos y Europa Occidental) Este tipo de declaraciones altisonantes, no permiten saber cuál sería su alcance real. En los momentos iniciales existieron dos gestos fuertes en esa dirección: la visita al foro de Davos en febrero de 2016 y el arreglo de los juicios en Nueva York con los holdout en abril que fueron reforzados por la llegada de líderes europeos en el verano porteño, como también la de Barack Obama, que fueron tomadas por el gobierno, y sus medios afines, como un apoyo explícito a la nueva estrategia internacional argentina.
El Mercosur, principal instrumento de inserción internacional de la Argentina posterior a la crisis de 2001, está perdiendo esa gravitación, ya que está reducido a ser la puerta de acceso a la Unión Europea y a la Alianza del Pacífico –la asociación regional deseada por la administración macrista-.
Con los diferentes momentos del comercio internacional, como ve Argentina a la Alianza del Pacífico y el TPP?
El gobierno tiene la creencia que el acercamiento a la Alianza del Pacífico, marcaría una ruptura con el pasado y que el modelo económico de sus países miembros sean espejos en los cuales mirarse, como economías abiertas, receptoras de flujos de inversiones que potenciarían las exportaciones, pero no atento a la estructura diversificada de nuestra economía, más similares a Brasil que a aquellos casos.
Este camino hacia el Pacífico, junto con el Acuerdo de Libre Comercio con la Unión Europea, está pensado como la primera estación de un recorrido que tiene como punto final la firma del TTP y del TTIP.
Pero esta estrategia resulta engañosa, ya que sería como subirse a un tren sin locomotora, ya que excluye al principal motor de la economía mundial (China), al margen de tener que sumarnos a un tratado cuyas normas fueron discutidas previamente, sólo adheriríamos y que expresan el interés nacional de Washington, como lo ha expresado el Presidente Barack Obama.
¿El cambio de gobierno cambia también el relacionamiento con EEUU y China? ¿De qué manera?
Con Estados Unidos a pesar de rechazar las “relaciones carnales” de los años noventa, el acercamiento a éste en la agenda de seguridad por los temas de terrorismo y narcotráfico, como en la económica por la apertura, desregulación y reendeudamiento, se le parece bastante.
La securitización de la agenda internacional llevó a los gobiernos argentinos desde la crisis de 2001 a evitar compromisos directos con la política de Washington, al respecto de la administración de Cambiemos va en una dirección contraria, al asumirlos. Se busca establecer un linkage con la lucha contra el narcotráfico y el terrorismo ubicando las actividades fundamentalistas en África Occidental, como en su momento se utilizó el envío de buques al Golfo Pérsico en 1991, o los atentados a la AMIA (mutual israelita argentina) con la Guerra contra el Terrorismo durante las administraciones kirchneristas.
En este plano también existen avances en materia de instalación de bases norteamericanas en puntos estratégicos del país, como así también diluir la línea que separa la seguridad interior de la defensa nacional -un consenso existente entre todas la fuerzas políticas desde 1983-.
En el plano económico, las reformas impulsadas por el gobierno argentino recibieron en reiteradas oportunidades por parte de Washington múltiples gestos de aprobación, como se observó en las visitas al país de varios funcionarios de la Casa Blanca a Buenos Aires durante este tiempo
Está claro que no podríamos esperar ensayos audaces, como los que caracterizaron al kirchnerismo en los últimos años, cuando orientó su estrategia hacia China, entre otros emergentes, ya que se anunció inicialmente la intención de “revisar” la Asociación Estratégica Integral -en lo referido a la construcción de represas en la Santa Cruz y a la cooperación en investigación espacial, por ejemplo- que fue objeto de una dura negociación donde el gobierno moderó sus expectativas iniciales, e incluso sufrió represalias, con la suspensión de la compra de aceite de soja en estos días.
PARA REFERENCIAR
SIMONOFF, Alejandro. ODR Entrevista Alejandro Simonoff. In: Observatório de Regionalismo. Artigos. 17 out. 2016. Disponível em: <http://deregionalismo.wixsite.com/observatorio/artigos>.